“Borombombom, Borombombom, para Lautaro, la selección.» Racing y River recién ingresaban al terreno de juego y el público en el Cilindro de Avellaneda hizo saber su deseo: la convocatoria del número 10 para jugar el Mundial de Rusia. En uno de los palcos centrales de la Platea A, el técnico de la Selección Argentina, Jorge Sampaoli, observó el partido que el Millonario le ganó a la Academia. Pero los flashes no se los llevó el joven delantero que ya estuvo presente en la última gira, sino Franco Armani, la indiscutible figura del encuentro y el principal responsable del triunfo.