
El jefe de Hacienda jugó de pívot y lanzó un mensaje de austeridad
La atmósfera, como cada vez que se pone en marcha un proyecto, era tensa. Por eso, el ministro de Producción, Francisco Cabrera, entendió que era momento de intervenir. Apenas pisó la sala de reuniones que tiene el flamante ministro coordinador Nicolás Dujovne en el Palacio de Hacienda le apuntó al titular de la Anses, Emilio Basavilbaso. Las risas, como un estruendo, inundaron el salón. El chiste, que nadie se animó a reproducir, sirvió de catalizador para distender el ambiente.