Fue, en el sprint final, un factor de disputa entre el massismo y el Instituto Patria: los primeros empujaron la hipótesis de una primaria Massa versus Fernández, y desde el peronismo K, se pujó por lograr boletas compartidas, según publicó Clarín.
Pero también hay una tercera opción que circula en el planeta K y repite algún massista: que el jefe del Frente Renovador aparezca como puntal del acuerdo, ordene a los suyos en las boletas del acuerdo pero que él, en persona, no figure en ninguna boleta.
Desde el PJ se lo consultó a Massa y el tigrense lo descartó: respondió que sí o si será candidato en estas elecciones.
Es la variable que menos simpatiza al peronismo que quiere el nombre y la cara de Massa en las boletas y en la campaña, ya que su figura es la que galvaniza el acuerdo y aporta, desde lo simbólico, un rasgo: la idea de apertura y de espacio no K dentro del peronismo.