El Ministro de Economía, Luis Caputo, aterrizó esta madrugada en Ezeiza proveniente de Washington con noticias que la City esperaba ansiosa. Tras reuniones con la cúpula del FMI y el Tesoro norteamericano, se ha sellado virtualmente el acuerdo técnico para un nuevo programa que incluiría desembolsos netos por US$ 8.000 millones. Este «colchón» de divisas es la condición sine qua non que el equipo económico había puesto para levantar las restricciones cambiarias remanentes.
El Fondo habría aceptado la hoja de ruta argentina de «competencia de monedas» en lugar de exigir una devaluación brusca o una flotación libre inmediata. La credibilidad ganada por el superávit fiscal sostenido durante 2025 fue el activo principal en la mesa de negociación.
El anuncio oficial se espera para principios de enero. Mientras tanto, los bonos soberanos reaccionan con subas del 2% en el pre-market, anticipando que el riesgo de default o estrés cambiario en 2026 se reduce a la mínima expresión.
